Educación y libros


Con demasiada frecuencia la educación en realidad actúa como una forma de terapia de aversión. Lo que se enseña realmente a los niños niños es a asociar el aprendizaje con el trabajo y asociar el trabajo con la monotonía de modo que posiblemente el resto de su vida nunca se acerquen a un libro. Así los libros se asocian con problemas de aprendizaje, el aprendizaje con el trabajo y trabajar con la monotonía.

Después de un duro día de trabajo, en lugar de relajarnos con un libro, va a ser mucho más probable que nos sentemos delante de una sitcom poco exigente, porque no pretende, obviamente, enseñarnos nada. Y si no trata de enseñarnos nada no parece ser aprendizaje, no parece ser trabajo y no es monotonía, por descarte debe tratarse de un placer.

Y creo que ese es el tipo de impronta que ha dejado en nosotros el proceso educativo.

Alan Moore

1 comentario:

Teresa Cameselle dijo...

No me había parado a pensarlo, pero veo que tienes mucha razón. Desde luego no es el colegio donde uno adquiere el amor a los libros.
Y cuanta gente hay por el mundo desconociendo las maravillas que se encierran en la literatura, pobres desgraciados, que ni siquiera saben que lo son.

SECCIONES