Podemos plantear cinco reflexiones a cerca de los
acontecimientos producidos en el ámbito televisivo en las décadas
norteamericanas de los cuarenta y cincuenta.
- Acerca de la audiencia; La nueva competencia televisiva,
incluía un claro componente de fidelización de la audiencia, con lo que los
programas-concurso trataban de extenderse a lo largo de varias semanas. La
fidelización trataba de asociarse a un arco de evolución dramática que no se
limitaba a un programa, sino a un concursante. Las variaciones en el formato y
la introducción de elementos diversos como puedan ser los guardias armados, la
clasificadora IBM, las cabinas insonorizadas, llevan claramente hacia un
análisis de los directivos en torno a cuales son las clavwes del éxito de este
tipo de programas. Los concursantes, aunque no desde sus orígenes, llegaron a
convertirse prácticamente en actores.
El proceso de manipulación fue paulatino
hasta llegar a las istrucciones precisas sobre coreografia. En un principio se
les preguntaban cosas que sabian, pero luego se fue más alla. La presión de los
patrocinadores se encaminaba hacia la búsqueda de sus objetivos comerciales,
hacia el encuentro de tipos que simpatizaran con los target de mercado. Charles
Van Doren fue el más famoso de los concursantes, símbolo de la estabilidad y
los valores nacionales. Lucha por la audiencia. Perfil del espectador, perfil
del consumidor. Participación del espectador, toda la familia ante el
televisor. El público era el auténtico valor de compraventa.
- Sobre la publicidad; El ámbito de la televisión privada,
suscitó como forma de financiación básica la publicidad. En Estador Unidos, la
primera muestra de publicidad fue la sponsorización, la presencia de una marca
que patrocinara el concurso era la norma. Los patrocinadores llegaon a duplicar
sus ventas cuando el fenómeno alcanzó una trascendecia sociológica, adquiriendo
así, un poder sinigual sobre las cadenas y los concursos que promovian. Revlón
fue el patrocinador más impartante de esta era.
Desde la promoción de
espectadores hasta la eliminación de concursantes, los promotores influían
sobremanera sobre todos los aspectos de la emisión. Finalmente y tras el
escándalo, las cadenas quitaron la sponsorización, sin embargo, en la
actualidad se ha introducido denuevo dads la saturación publicitaria.
- El formato en directo, se impuso definitivamente y la
clonación de programas se multiplico enormemente. Prima el espectáculo. “La
pregunta de los 64000 dólares” fue un triunfo absoluto. Surgió de un programa
de radio “Lo toma o lo deja” Posteriormente, “El reto de los 64000 dólares” fue
el heredero directo del primero, con una audiencia sin precedentes. La enorme
proliferación de programas – concurso en los 50 es una viva muestra de la
acogida faborable y la gran ilusión y pasiones que motivaba.
- La confianza en la televisión fue sin duda el gran
elemento quepsicologicamente influyó en el escándalo, pues el estatuto de
verosimilitud que la televisión profesaba, fue destruido en gran medida tras
las investigaciones. El los años cincuenta, ver era creer y con los más de 15
millones de espectadores que llegó a tener, su influencia ebn los usos y
costumbres fue enorme. El proceso legal que motivó, terminaron fundamentando
las leyes federales contra el fraude televisivo, sin ya poder remediar la
ofuscada confianza en el medio.
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